Principios que funcionan en a vida y el liderazgo

 

Bastante interesante este libro. Colin Powell fue el ministro de guerra de Bush durante la famosa Tormenta del Desierto, en la guerra del Golfo Pérsico.

El tipo es militar hasta la médula y todas las recomendaciones sobre liderazgo que comenta en el libro están basadas en su experiencia bélica y geopolítica. Aclarado eso, me parecieron muy criteriosas muchas de las lecciones, por lo cual termino recomendando esta lectura para quienes están interesados en temas de liderazgo.

Parece ser que ni bien lo convocaron para trabajar en el Pentágono, una revista famosa quiso hacerle una entrevista. Hablaron con su secretaria para pedirle letra y ésta les dijo que bajo el vidrio de su escritorio Powell tenía una docena de papelitos con aforismos, pensamientos y boludeces así. La cuestión es que con ese material pautaron la nota y el lento de Powell terminó haciendo este libro. Groso.

Mas allá de eso, insisto en que la mayoría de sus principios sí funcionan (como dice el título del libro) y algunos de los que más me gustaron son estos:

No es tan malo como piensas, se verá mucho mejor en la mañana. (es buenísimo, me pasó mil veces).

Moléstate, luego supéralo. (me pasó mil veces).

Evita que tu ego esté tan allegado a tu posición que cuando tu posición se desmorone, tu ego caiga con ella. (me pasó mil veces).


Otra de las características de Colin Powell como líder efectivo es que no se deja llevar por análisis superficiales “medias verdades”, él prefiere indagar con los ojos abiertos y estar alerta hasta encontrar los elementos necesarios, de aquí los siguientes principios:

Sea un desorganizador.

No acepte el valor de las cosas por su apariencia.

Recuerde que el éxito puede conducir al fracaso y que la complacencia es el enemigo.

Ponga la verdad y la integridad por encima de todo lo demás.

Profundice algo más


Y así un montón de consejos más. Está muy bien explicado y la lectura es amena y fluida pero, de nuevo, el muchacho es militar y es yankie, por lo tanto no es santo de mi devoción. Me acuerdo que con el tema de la invasión a Kuwait estaba todo el día en la tele; el siempre dijo que parte de la guerra se gana ante la opinión pública y en particular en los medios. Lo que pasa es que realmente se fue de boca, y cuando se comprobó que las denunciadas armas de destrucción masiva no existían quedó irremediablemente como un chanta y cuando George W. Bush fue reelecto como presidente a él le pegaron una patada en el trasero.


Por ahí va.


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